Al calor de una charla entre amigos, escuché una verdad casi absoluta: a la pizza la crearon los italianos, pero la mejoraron los argentinos. Las pruebas parecen estar a la vista entre Luis de Tejeda y José Echenique.
En esa esquina, la propuesta de “Rincón nuestro, Pizzería Popular” empieza por hipnotizar con sus más de 30 variedades elaboradas a la vista.
El horno a leña, ubicado a media altura, se lleva todas las miradas. Es el sueño del pibe para los amantes de la cocina hecha en casa. La masa, con todos los ingredientes sobre su lomo, va directo al piso del horno, sin nada que la separe del calor, para impregnarse de ese sabor ahumado y salir con textura bien a la piedra.
Como supo aclarar un amigo al momento de leer la carta, “la pizzería de popular no tiene nada”. Los precios exceden el promedio de lo que el cordobés está dispuesto a pagar por este tipo de plato, pero en mi opinión, al paladar quedan por demás justificados.
Una fugazzeta arranca en los $139 y una con frutos de mar ronda los $265. También, hay propuestas de calzoni desde los $208. Las bebidas sin alcohol tienen un costo de $30 y la cerveza de litro $100 en promedio.
Mangia, mangia che ti fa bene
El lugar hace honor a su concepto de pizza gourmet. Para sentir que el verano no está tan lejos, probamos la hawaiana (muzza, ananá, cerezas y azúcar negra), un perfecto equilibrio de sabores agridulces. La crocancia en su punto justo e ingredientes de primera calidad.
Seguimos con la roñosa (muzza, champignones, hongos de pino, pepinillos, olivas verdes y negras). En cada porción, la promesa se cumple y la temperatura se mantiene hasta decir basta.
No podíamos dejar pasar la variedad que aporta frescura: la de Rúcula. Muy bien acompañada por tomates cherry, jamón crudo, fontina, olivas y base de muzzarela.
Hay que hacer caso a la carta: “mangia, mangia che ti fa bene”. Al repasar todas las opciones, que incluyen variedades vegetarianas, vas a querer elegir más de una. El dato: podés optar por el tamaño en formato pequeño.
La masa casera y a la piedra, con salsa suave es una de las mejores logradas en nuestra ciudad.
Mi piace molto
La estética vintage suma muchos puntos a la hora de elegir un lugar “con onda” en la zona norte de la ciudad. Con materiales reciclados en un ambiente rústico y descontracturado, Pizzería popular abre sus puertas todos los días a partir de las 20.
Las típicas lucecitas blancas, pizarras con buenas vibras, una amplia galería que los más audaces pueden disfrutar en invierno son algunos detalles para destacar. Hay un rincón reservado para el leñero y un baño cuyas paredes están empapeladas con recetas de cocina.
Merece una mención especial la agilidad en la atención y el look de los maestros pizzeros: tiradores y boinas que recrean postales italianas.
Algo que se podría mejorar es el estrecho espacio que separa a las mesas en el salón principal y la comodidad de las sillas.
De cualquier modo, el lugar tiene un encanto propio y ya se posiciona entre las preferencias de muchos cordobeses.
Si te acercás a disfrutar la experiencia, no te olvides del consejo de la carta y ¡Buon appetito!
